Our cookies

We use cookies, which are small text files, to improve your experience on our website.
You can allow or reject non essential cookies or manage them individually.

Reject allAllow all

More options  •  Cookie policy

Our cookies

Allow all

We use cookies, which are small text files, to improve your experience on our website. You can allow all or manage them individually.

You can find out more on our cookie page at any time.

EssentialThese cookies are needed for essential functions such as logging in and making payments. Standard cookies can’t be switched off and they don’t store any of your information.
AnalyticsThese cookies help us collect information such as how many people are using our site or which pages are popular to help us improve customer experience. Switching off these cookies will reduce our ability to gather information to improve the experience.
FunctionalThese cookies are related to features that make your experience better. They enable basic functions such as social media sharing. Switching off these cookies will mean that areas of our website can’t work properly.

Save preferences

Efectos fisiológicos

Cuando se mata a un animal correctamente con un disparo en la cabeza con un proyectil libre, sea una bala o una carga de plomo, caerá colapsado de inmediato, dejará de respirar y quizá sangre profusamente por el agujero de entrada, la boca y/o la nariz. Puede haber o no una actividad tónica exagerada inmediata de los músculos o la carcasa puede aparecer completamente relajada. Tras un periodo de máximo un minuto, la carcasa puede empezar a contraerse y, en algunos casos, convulsionar de forma bastante violenta (especialmente en los cerdos). Esto es normal en un animal que ha recibido un tiro correcto. Si hay alguna duda sobre la efectividad del disparo, compruebe el abdomen para observar la ausencia de respiración rítmica y el ojo para observar la ausencia de reflejo corneal antes de decidir si es necesario disparar al animal de nuevo. Las convulsiones empezarán a remitir después de un tiempo (hasta un minuto) y finalmente cesarán, dejando una carcasa inicialmente flácida que después, a su debido tiempo, mostrará los efectos del rigor mortis. 

Indicadores de un tiro efectivo:

  • El animal cae colapsado inmediatamente y deja de respirar
  • La carcasa puede estar tónica y relajada
  • Expresión fija vidriosa en los ojos
  • Sin reflejo en la cornea
  • Se pueden producir convulsiones tras un tiempo de hasta un minuto

Back to top